Dialogo- El segundo dia

[...]

-Solo te pido un favor, no te enamores de mi

-No puedo controlar lo que siente mi corazon...

-No te quiero lastimar, te quiero

-Te quiero (te amo)

Se que te seguire extrañando al amanecer

Carta #22

Querido Extraño:

Solo nos vimos lo suficiente para crear un recuerdo distante de lo que pudo ser un amor efimero, con un suave sabor de nuestros labios grabado en la memoria, con todas esas caricias compartidas en la obscuridad silenciosa.

Ahora sé que existes extraño, sé que tienes un nombre, una voz.... y un hermoso rostro que hoy me invita a besarte.

También sé que no te olvidaré jamás, y quien sabe, tal vez te siga buscando con los ojos cerrados, para ver si de casualidad te vuelves a aparecer en mi camino, con la condición de que esta vez te quedes conmigo.

Querido extraño                        hoy le sonrío a la ausencia de tu posible recuerdo...

Pero dime, extraño ¿seras capaz de recordarme tú al amanecer?

¿Dónde estás?

Veo tu figura en sueños,

sueños que suelo olvidar al despertar.

 Pierdo tu rostro entre recuerdos,

recuerdos que ya no volverán.

 La nitidez de tu silueta se ahoga entre estos pensamientos

que no me dejan en paz.

 Sólo espero que el olvido

no me gane una vez más.

 Sé que te he visto en algún lugar.

Sé que trasciendes el tiempo

cobrando la forma de un recuerdo

que vagamente en mi mente está.

 Sé que he disfrutado de tu aroma,

de la sensación de tu tacto y demás.

 Son emociones que el olvido no me arrebatará jamás.

Son inconfundibles pistas con las que aun no te he podido encontrar.

Entonces dime: ¿dónde estás?